CONTRA LA DIALÉCTICA MARXISTA

20 De Marzo del 2007.

 

Realmente aquel joven, sin comerlo ni beberlo, convirtiose en uno de mis profesores.

Apenas llevaba un mes en la Facultad cuando se presentó, entre clase y clase, asistido de una pléyade de camaradas guardaespaldas:

-¡Compañeros¡. Fulanito….. nuestro camarada de quinto de medicina viene a pedir vuestra colaboración……  para una causa tan noble y espiritual ..... que ni ahora la recuerdo ni creo que entonces nos la concretaran.

….. Y Fulanito, (con melenas a lo Jesucristo Superstar) nos lanzó una diatriba tan llena de incomprensible verborrea que dudo nadie entendiera nada.

Fue el caso, que al poco, volvime a encontrar con una actuación de Fulanito. Esta vez en la facultad de Historia y presentándose como un camarada que estudiaba quinto de Derecho.

Quizás no mintiera, estaba ya lo bastante crecidito  para haber estudiado hasta quinto de medicina y haber llegado luego hasta quinto de derecho.

Desde entonces estoy inmunizado contra lo que se dio en llamar dialéctica marxista.

A Fulanito me lo ha traído hoy a la mente un escrito de Josep Renau que trascribo para asombro y pasmo de quienes desde nuestra ignorancia desconfiamos de todo aquello que no este escrito con meridiana claridad:

 "En la concatenación dialéctica de las leyes sociales, la relativa lejanía entre los término de causa a efecto enriquece la complejidad del último, haciendo su significado, en apariencia, más independiente de las causas determinantes. Si bien estas reflexiones deben prevenir cualquier interpretación de los hechos desligada del conjunto, no es menos cierto que el sentido multilateral que asumen los fenómenos culturales no puede despistarnos por laberintos fenomenológicos, haciéndonos perder de vista la tendencia general de estos hechos, el lugar que ocupan en el tiempo y en el espacio en que se manifiestan, y el papel que juegan dentro del proceso dialéctico de transformación de las condiciones históricas y sociales." (1).

De todo lo cual, no entiendo absolutamente nada (¡Que lejos esta de los escritos de Marx, de Engels, de Stalin, o de Mao¡). Pero si entiendo que cuando las autoridades republicanas huyeron a Madrid llevaron consigo todas las obras del Prado, y cuando salieron de Valencia, también las obras salieron con destino a Francia y si se que Renau (a la sazón no recuerdo si Director del Prado o Director General de Bellas Artes) justificó esa actuación en la imposibilidad de protegerlas en la cámara acorazada del banco de España, porque al ser de gran tamaño no cabían por la puerta y tampoco entiendo como a una mente tan preclara no se le ocurrió que para que cupiesen bastaba con desmontar los lienzos de sus bastidores.

 Y es que a veces dialéctica marxista es incomprensible. 

Si queréis leer algo interesante del Sr Renau ver su escrito sobre la "Función del Fotomontaje" que publicó como homenaje a John Heartfield. 

Y por más que nos duela hagámonos todos una breve reflexión sobre su poste del Balneario de las Arenas (que tanta envidia nos da cuando lo vemos en casa de Esther): ¿no colinda su estética con otra de carácter fascista?.

------------------------

(1) Tomado de su artículo "Significación de la obra de arte como objeto del mercado artístico).

 A 24 de Marzo del año 2007.