2008. 5 de Julio.
Para mi amiga Trini en su aniversario.
¡FELIZ CUMPLEAÑOS¡
Era su aniversario y habíase levantado con la sensación de que la realidad dejaba caer sobre ella mil hilos de seda, suaves, cálidos, cómodos……. Fuertes cual cadenas.
Bien sabia ella que solo somos jóvenes en la medida en que ante nuestra vida
se abren nuevas posibilidades no agostadas, nuevos caminos que hollar. Bien
sabia ella que es joven quien todavía puede elegir la senda por la que se
desviará mañana de la vía por la que prometen conducirnos las
circunstancias.
Y vino en complacerse de aquel fuerte hilo de seda que la ataba a su aula, a
sus alumnos. ¡No¡, ¡No¡, No enseñaba física. Ella era profe de verdad. Profe
de hombres jóvenes, casi todos niños, casi todos libres, aun no atrapados en
la telaraña de sus fobias, de sus vicios, de sus necesidades, (quizás de sus
necedades) o aun de las necesidades de los demás, que a la postre es lo que
todos hemos venimos a paliar en este mundo.
Y recordó que Dios tiene por costumbre regalar la juventud a quien sonríe (aun frente a la adversidad).